Gantz mola, pero...

Por más y más animes que he visto y mangas que he leído, la mayoría, salvo honrosas excepciones, son unos malditos chupasangres de DragonBall, Sailor Moon, y el concepto de "wou tenemos superpoderes vamos a salvar el universo y si no podemos con el malo aumentamos nuestro poder con una nueva hiperforma salida de la nada". Pues Gantz es una de esas excepciones.



La historia comienza con Kei Kurono, estudiante, que está en la edad de pensar en las pivas. Un día, resulta que un borracho cae a la vía del tren, y se ve, digamos obligado a intentar salvarle ya que encuentra a Masaru Kato que es el primero en lanzarse a ayudar. Salvan al borracho, pero mueren atropellados por el tren. Y, en un instante, se ven transportados a una habitación con personas que acababan de morir también, y una extraña bola negra, frente a ellos. A partir del accidente que ya os he comentado, la bola negra del centro es presentada como Gantz (de ahi el nombre de la serie), y les obliga a hacer misiones en las que deben matar a quién les diga, y si se niegan, ellos mueren. Y claro, para rematar la faena, si cuentan algo sobre Gantz, una bomba instalada en sus cabezas estalla, y mueren.

Se trata digamos de una serie de ciencia ficción, con aliens, monstruos del más allá, vampiros, etc, y digamos, tirando para +18 por ser gore y realista. Realista en el sentido de que salen desnudos también. Pero eso no es lo que mola de Gantz.

Uno de los enemigos finales de Gantz

Lo que tiene Gantz es que te mantiene en vilo desde siempre, y quieres saber que pasará, y jamás puedes predecir que es lo siguiente. Los autores, son unos cachondos, y lo mismo te ves a uno a punto de morir que en la escena siguiente empieza a fornicarse al puto alien. Y te loleas y gritas EPIC. Además, la historia no acaba, pero no es como Lost u otras series que empiezan a meter subtramas, sino que la propia trama principal es la que nunca concluye ni sacas nada en serio de ella. Y por eso engancha. Pero maticemos.

Maticemos porque aunque engancha se pasa de castaño a oscuro. Porque, si sigues la serie últimamente, esto a tomado unas proporciones épicas que nadie se habría imaginado, pero que rozan la pesadez aunque siguen manteniendo al lector en vilo. También habrñia que habalr del dibujo, que cada vez es más rápido, más gráficos de ordenador aplicados al papel, y más colmado, y claro, eso unas pocas veces está bien, pero ya empieza a dar la vista de que no se esfuerzan demasiado al hacerlo por lo visto.


De todas formas, es un manga altamente recomendable (y digo manga, porque aunque hay anime es un bodrio y lo acaban sin razón), del que no peudo sacar más conclusiones que esas, porque aún no está acabado. Recomiendo ver hasta el capítulo 18 del anime (que está en español de España) para adelantar, y luego seguir con el manga.

Leedlo. No os decepcionará.