Vamos, a estas alturas ya conoceremos todos lo que es Second Life, ¿no? Bueno, un resumen rápido, es un programa online (porque es algo más que un juego) de pago en que representas, al estilo Los Sims, un avatar con el cual puedes bailar, cantar, trabajar, ganar dinero real, etc. Eso muy resumido.
Pues una italiana llamada Palela Anderson (chistes loleantes por todas partes para ese nombre) lleva desde hace 3 años cumpliendo su sueño de ser amiga con derecho a roce de pago para los viandantes de las cibercalles de Second Life.
“Tenemos una hermosa calle de putas aquí en Italia y siempre quise ser una de ellas. Cuando era adolescente, solía observar a esas bellas mujeres en la calle, cómo esperaban que uno de los coches parara y, a continuación, hechizar al cliente.”
¿Por qué? Pues porque en la vida real, con lo fácil que habría sido en realidad pintarse los labios, ir sin sujetador y parar coches en la carretera enseñando las que "tiran más que dos carretas", decidío hacerlo en Second Life para no herir a su familia. Aunque, dice que "ya lo había intentado" en la vida real. Así de fea será. O feo. O hermafrodita.
Bueno, si tenéis una cuenta allí, que sepais que la nochecita de pasión con la señora cuesta entre 2000-3000 Sl Dólares (al cambio, unos 15€ reales), y vustro avatar se lo pasará pipa mientras tú miras con la boca (y la bragueta) abierta.
Pues, sin más, un aplauso. Y, como veis, niños, ¡los sueños se cumplen!
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